Eugenio Santangelo analiza los espacios participativos en la obra de Guliano Scabia a través del proyecto del poeta-teatrante italiano que, en todo su itinerario, intentó hacer salir al teatro fuera de sí, revitalizando su potencia de relación y construcción de un espacio público realmente plural (y conflictual). Ello significa provocar una participación activa del público no solo en la “interpretación” de los espectáculos, sino en sus mismos modos de producción. En lugar de invitar a públicos predeterminados, el teatro se transforma en la búsqueda de un contacto “orgánico” con las comunidades en las que acontece (barrios obreros, escuelas de pueblo, hospitales psiquiátricos). Al desactivar las divisiones sociales de sus espacios institucionales, el teatro se vuelve estímulo e invitación para saberes autónomos y comunitarios.