Soy Gumercinda Ontiveros Luna. Nací en Apaseo el Grande, Guanajuato, el día 13 de enero de 1958. A la edad de nueve meses comencé a caminar y al cumplir año y medio enfermé de poliomielitis. A consecuencia de esta secuela tuvieron que operarme del pie izquierdo a la edad de 7años y desde entonces, uso un aparato ortopédico en el miembro izquierdo, y camino apoyada en un bastón.
¿Qué se aprende de la discapacidad? Pues no me ha impedido salir adelante. Estudié la primaria normal, y luego una carrera comercial, secretariado. Ya con la carrera estudié mi secundaria en sistema abierto, cuando ya estaba trabajando.
El encontrar trabajo no fue fácil pues después de recibir mi título de Secretaria Ejecutiva con conocimientos de inglés, duré dos años para lograr entrar a trabajar. Estuve tocando puertas y hasta que alguien se fijó en mi para comenzar a laborar como cajera en una mueblería. Ahí logré estar dos años. Salí en busca de algo mejor, pero tuve que trabajar aquí y allá hasta entrar a una filial de Kimberly Clark donde duré casi diez años. Para mí, fue mi mejor logro ya que comencé de auxiliar de oficina y terminé siendo jefa del Departamento de Facturación
Al salir de SODISA (filial de Kimberly Clark) y haber logrado muchas satisfacciones, tuve la oportunidad de conocer al que fue mi esposo con el que viví por espacio de quince años en la ciudad de México. Ambos con secuela de polio. A él agradezco profundamente la oportunidad de conocer lo que es vivir en pareja, y también la oportunidad de llegar al mundo de la joyería en donde permanecí por trece años.
Ya pensionada logré un trabajo en una agencia de Autos (Renault), donde solo laboré por espacio de 8 meses. Al dejar de trabajar regresé a vivir con mis padres, y apoyar a mi padre con sus citas médicas debido a su enfermedad hasta su fallecimiento en 2015.Continué acompañando a mi mamá hasta el 2018 en que también falleció repentinamente. Esto me dolió profundamente, pues no esperaba que fuera tan rápido.
Actualmente continúo con mi hermano Juanito de 59 años, quien sufre de episodios epilépticos y tiene un leve retardo. Cabe mencionar que uso silla de ruedas desde el 2012. A petición de mi mamá dejamos la casa de Tlalnepantla y nos trasladamos a Apaseo el grande, Guanajuato en donde actualmente residimos.
En estos eventos he aprendido mucho porque pese a la dificultad en mi cuerpo siento que puedo responder a las cosas que aparecen. Yo quiero seguir aprendiendo y también que aprendan de mí. Ahora mi propósito es aprender a manejar bien la computadora, pues es algo así como un poco complicado, pero tengo que lograrlo. Ahora con lo de la pandemia se hace más necesario saber más cada día de la tecnología para estar en contacto con la gente, para no estar aislados y para saber más de lo que sucede afuera y que sepan de nosotros, también.