La gente no debía estar cerca
No nos dejaban salir y hasta nos regañaban si veíamos a una chica. Nos decían que los hombres no debemos estar muy cerca de las mujeres. Nos decían que en general la gente no debía estar cerca de nosotros. Ponían ese temor en la gente de afuera para que se fueran. Eso tuvo un impacto grande en la vida íntima de uno. Si no cumplíamos con las reglas, nos amenazaban con sacarnos. ¿A dónde íbamos a ir? Teníamos miedo de salir de aquí y entonces preferíamos obedecer lo que nos imponían. Y a esta edad, pues aún más hay que obedecer. Ya estando viejos ya casi no hay proyectos y más si estamos enfermos.