Fragmento de Dentro del exilio, poema en cinco partes, inédito.
Primavera y verano de 2020, en Saint-Julien-Molin-Molette
I
Confinado cada día consulto
a un poeta
hojeo alguna de sus obras
Anteayer me zambullí
en Ecce Homo de Georges Ribemont-Dessaignes
Ayer le tocó a Juarroz
con su título único y lleno de sentido
Poesía vertical
Y hoy Emily Dickinson
tocó la puerta
de mi cerebro ya libre de cadenas
Pues el adiós es la noche me
murmuró al oído.
Todos vamos como si lloviera
y luego a veces nos quedamos dormidos tarde o temprano
Dispraxia diabética
afectado por la enfermedad de Lyme
disminuido ahora debido a una sobrecarga ponderal efectiva
en ocasiones falta de sueño
hace años que me he convertido
en un caso clínico
Mi estado de salud
deja mucho que desear
El mundo va como debe ir
pasará mucho tiempo antes de que me vuelvan a ver
Ahora hay demasiada agua
en mi vaso de vino tinto
Soy ese paciente que aguarda el toque de queda
Las fábricas están vivas a lo lejos
y el planeta de sueños se hunde
en los misterios de la claridad
Camina o revienta me dijeron
Camina o revienta porque los milagros
sólo ocurren una vez
en la vida
aunque la vida esté
repleta de ellos sin embargo
Ya no me permito
mirar a una mujer hermosa en la calle
aún menos abordarla
o contemplarla de manera insistente aunque discreta
Me hicieron comprender
lo que hay en eso
de indecencia y dominación
Ya no me arriesgo
a compartir mis deseos
y mis disgustos
No me gusta raspar ni herir
y sobre todo no me gusta sorprender
Mi poema irrita a los burgueses
y alegra el corazón de los mortales
Mi boca es el grito del mundo
mi rostro su reflejo
por fin recobré mi inocencia
y hace mucho
que despedí a mis últimos demonios
Ahora un cielo de tinta azul
se esfuma en la noche
No es
la primera vez que ocurre
pero quisiera esta noche
poder decirlo todo
en una sola frase
en una sola palabra
Quisiera
dar libre curso a la vida
Confinado como
en cárcel de silencio
y al alba
los cantos de los pájaros
los murmullos del viento
Vuelve a caer entonces la noche
ya sólo se ve
esa sutil luminosidad del aire
en la sombra asfixiante
Ya sólo se ve el horizonte carcomido
Ya sólo se ve la frontera
Ya no se ve nada
Confinado estoy y sigo
MUDO
La Bitácora del encierro es un proyecto de la UAM Cuajimalpa